Aunque el jugo de pomelo contiene varios nutrientes, incluyendo vitamina C, potasio y licopeno, ciertos químicos en el jugo y pulpa de pomelo pueden afectar la actividad de las enzimas en el sistema digestivo responsables de descomponer ciertos medicamentos. Como resultado, esto a menudo conduce a concentraciones anormalmente altas de medicamentos en la sangre, causando efectos secundarios graves. El pomelo amargo y las naranjas agrias también pueden tener efectos similares.
Los siguientes son medicamentos conocidos que pueden tener reacciones graves con el pomelo: amiodarona (utilizado para tratar y prevenir arritmias), buspirona y sertralina (antidepresivos), carbamazepina (un medicamento antiepiléptico), ciclosporina y tacrolimus (inmunosupresores), felodipino, nifedipino, nimodipino, nisoldipino (bloqueadores de los canales de calcio utilizados para tratar la hipertensión); saquinavir (medicación para el VIH); simvastatina, lovastatina y atorvastatina (estatinas utilizadas para tratar la hipercolesterolemia).
Si te preocupa que el jugo de pomelo pueda interferir con tu medicamento, consulta a tu médico. En algunos casos, es crucial evitar el pomelo, toronja, naranjas agrias y sus productos, ya que esperar 24 horas después de beber jugo de pomelo para tomar tu medicamento no puede prevenir las interacciones. En otros casos, puedes cambiar a medicamentos alternativos que no interactúan con estas frutas.