Muchas futuras madres se encuentran necesitando usar el baño con frecuencia por la noche, especialmente comenzando en el segundo trimestre. Muchas pueden preguntarse: ¿Es esto normal?
De hecho, esto es muy común. Aunque la cantidad de orina pasada cada vez puede ser pequeña, generalmente se debe a la compresión de la vejiga y la relajación de los músculos del suelo pélvico. No hay necesidad de preocuparse excesivamente, pero es importante estar segura al levantarse por la noche.
Además, algunas mujeres embarazadas pueden experimentar fugas de orina al toser o cuando hay un aumento de la presión abdominal, lo que también se debe a las mismas razones.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que retener la orina durante mucho tiempo puede aumentar el riesgo de infecciones del tracto urinario. Si las futuras madres experimentan síntomas como micción frecuente, urgencia, dolor al orinar o fiebre, se recomienda buscar atención médica de inmediato.