Generalmente, un aumento repentino del apetito es normal, pero si está acompañado de otros síntomas, puede indicar problemas de salud. Las siguientes enfermedades pueden ser la razón de su aumento de apetito:
Uno de los síntomas típicos de la diabetes es un aumento del apetito. Esto se debe a que una gran cantidad de glucosa se excreta en la orina, lo que lleva a una absorción insuficiente de azúcar por parte del cuerpo, estimulando el centro de alimentación del cerebro, lo que hace que el paciente sienta hambre con frecuencia.
La digestión rápida a menudo es causada por un aumento del ácido estomacal, comúnmente visto en las úlceras pépticas. La mayoría de estos pacientes están en un estado de alta acidez estomacal, y la comida se digiere rápidamente después de comer, lo que lleva a la sensación de hambre.
El hipertiroidismo es causado por la secreción excesiva de hormonas tiroideas, lo que lleva a un aumento del metabolismo y al consumo excesivo de energía, lo que resulta en un aumento del apetito. También a menudo se acompaña de fatiga, sudoración, intolerancia al calor, debilidad general y pérdida de peso.
Los pacientes tienen un apetito anormalmente aumentado y obesidad corporal, con acumulación de grasa en el pecho y el abdomen, pero las extremidades no son gordas e incluso pueden aparecer delgadas.
Si no se observa la higiene y se contraen parásitos intestinales como anquilostomas o tenias, puede llevar a una función anormal del sistema digestivo, lo que resulta en un aumento del apetito.