Microbiota Intestinal Desequilibrada: Prolongados períodos de desvelo y ritmos biológicos alterados pueden perturbar el equilibrio de la microbiota intestinal, provocando el crecimiento excesivo de bacterias dañinas. La pérdida de la microbiota intestinal normal puede alterar la permeabilidad intestinal, permitiendo que las bacterias dañinas produzcan grandes cantidades de endotoxinas. Estas toxinas pueden circular por el torrente sanguíneo y alcanzar todo el cuerpo, incluida la cara, causando acné persistente.
Por lo tanto, las noches largas y frecuentes pueden cambiar silenciosamente la microbiota intestinal, causando un desequilibrio donde las bacterias dañinas dominan, produciendo toxinas que se manifiestan como acné.
Además, sentarse durante períodos prolongados y el estreñimiento también pueden provocar acné.
Sentarse Durante Períodos Prolongados y Estreñimiento: Sentarse durante períodos prolongados es común entre los trabajadores de oficina. Cuando el trabajo se pone ocupado, las largas horas de estar sentado se vuelven inevitables. Sentarse durante períodos prolongados ralentiza la motilidad intestinal, extendiendo el tiempo que los desechos permanecen en los intestinos. El agua en los desechos es fácilmente absorbida por los intestinos, lo que lleva a heces duras y estreñimiento. El estreñimiento causa que los residuos de los alimentos fermenten en los intestinos, produciendo toxinas que son absorbidas por el cuerpo a través de la circulación, lo que luego se manifiesta en la piel como acné.